mayo 03, 2013

(( REVELACION I )) - LA HISTORIA DEL REY ARTURO, POR MAESTRO HILARION




REY ARTURO
Y LOS CABALLEROS DE LA MESA REDONDA
DICTADO POR MAESTRO HILARION.
 
 

“Una historia convertida en leyenda”.
 
 
 
Mucho se ha trasgiversado con la historia del Rey Arturo, haciendola una leyenda a travez de peliculas, presentado una y total distorcion de la esencia y vivencia de dicho Rey y sus hermanos estelares quienes lo acompanaron en dicha mision.
 
Arturo comienza la historia de los que hoy se conocen como Los "CABALLEROS TEMPLARIOS". 
 
Hoy por mandato de las Esferas de la Luz, se os pide reveler dicho texto, con el objetivo de ir reagrupando hechos cronologicos de historias pasadas quienes conectan con eventos  posteriores.
 
Muchas especulaciones se han escrito en base a historias de siglos de nuestros antepasados.
 
Dicho texto es una Revelacion por el Maestro Hilarion para que su contenido fuera transmitido a nuestra hermandad durante estas epocas del despertar y Ascencion.
 
Interpreten y escuchen a travez de la luz de su alma-Corazon.....
 
 
 
MAESTRO HILARION:

 
 
Hay relatos de gran encanto que han perdurado a través de los siglos envueltos en poéticas leyendas. Al parecer, productos de la imaginación; pero, en realidad, fueron hechos reales y concretos, situados en determinado tiempo histórico.
Uno de ellos es el  de Camelot (ciudad de Inglaterra), el Rey Arturo, los caballeros de la mesa redonda que vivieron en la tenebrosa Edad Media, en el país de Inglaterra, llamado Bretaña por entonces.
 
¿Existió el Rey Arturo? ¿Fue real el caballero apuesto, noble, valiente a quien llamaban Lancelot del Lago y venía del país de Francia?
Las fuerzas de la Otra Polaridad, representadas por  los poderosos del mundo, siempre hacen muy bien su trabajo tergiversando los hechos verdaderos, cambiando, torciendo y desviando todo: pero, aunque el relato haya sido mutilado y torcido, aún queda la esencia de una bella leyenda en la cual se conservan los nombres de los personajes y del lugar.
Los hechos verdaderos, lo que realmente pasó luego de haber caído en manos de la iglesia, fue cambiado pues se le dio un giro distinto.
 
 
El gran tergiversador era un obispo que vivía por entonces con el nombre de Benjamín Northín, quien tenía cierta predisposición literaria.
Al pasar por su pluma el relato, se convirtió en un melodrama, en una especie de novela rosa envuelta en la intriga de amor, la venganza y los celos.
Esa es la historia conocida en la actualidad, conservada a través del tiempo. (Historia relatada del Rey Arturo y la traicion de su esposa Gwenevere)
Debido a la gran importancia y trascendencia de los hechos por tratarse de una labor de luz planificada desde Arriba, esa realidad debe ser esclarecida y así, después de tantos siglos, ha sido posible conocer la verdad expresada por los Maestros Ascendidos en el Foco Ray Sol porque, a la Obra Ray Sol, le corresponde ser el faro que ilumine las conciencias en este fin de ciclo:
 
“Antecedentes”.
 
 
 
En esa época tan oscura en la que ya casi nada de verdadero quedaba de la enseñanza y la vida del Mesías Jhasua de Nazaret (Amado Sananda), la iglesia tenía gran poder y mando.
Deliberadamente, oculto la verdad presentando al pueblo restos muy distorsionados de ella.  
Encumbrada en su riqueza y poderío, tenía bajo su control no sólo lo espiritual sino toda manifestación artística, cultura, social, económica e incluso política.
En conjunto con los reyes y las clases altas de la nobleza, hundió al pueblo en la más oscura ignorancia y completa miseria.
La figura del rey se asociaba con atributos divinos. Entre todos ellos, rebajaban tanto al pueblo que quedaba anulado cualquier deseo de superación espiritual y material.
La gente era cada vez más ignorante: pero no había más opción que aceptarlo así, pues se inculcaba repetitivamente que esa era la voluntad de Dios.
Les negaban el derecho a la educación, a cualquiera mejora social o material con la intención de tener sometidas a las personas, que se conformaran con esas injusticias.
Todo ello, tenía una sola finalidad: Proteger los privilegios de las clases poderosas, siempre unos pocos a quienes Dios supuestamente había elegido para mandar e imponer un sistema de opresión, de tiranía.
Para contrarrestar tanta negatividad y establecer un foco de luz, de contacto directo con las Altas Esferas, nacieron el Rey Arturo y los Caballeros que lo acompañaban.
Ellos encarnaron también con el fin de despertar a la gente dormida en el sufrimiento, la miseria, la tristeza.
La Iglesia, con sus dogmas y rituales, los había alejado de su divinidad interior, los llevó a tal grado de rebajamiento que creían ser nadie, cosas, como animales sometidos a la arbitrariedad de sus amos porque, en aquella época, los únicos que brillaban eran: La Iglesia, los reyes, los cortesanos y los nobles poderosos.
Ante tal situación de oscurantismo y estancamiento se proyectó la actividad de la Mesa Redonda desde Arriba, con un aspecto interno de naturaleza espiritual y otro externo de orden social.
En cuanto a lo interno, había un foco de luz y contacto directo con las Altas Esferas. Allí, se recibían verdades espirituales muy altas, así como también referentes a diversos aspectos de la vida y enseñanza del Maestro Jhasua de Nazaret.
Fue igualmente un lugar de formación para algunas personas que, en tiempos futuros, trabajarían por la libertad de las naciones del mundo, con objeto de suprimir los sistemas errados de gobierno como la monarquía y las políticas opresoras.
En la Mesa Redonda, había dos tipos de integrantes:
-Los del reducido grupo interno y los que estaban en actividades externas.
-Entre los primeros, se encontraban quienes, en anteriores encarnaciones, llevarían los nombres: George Washington, Simón Bolívar, Francisco de Miranda y Antonio José de Sucre.
Por supuesto, en aquella época, ellos no lo sabían y vivían con otros nombres.
La actividad interna era realizada por trece personas nacidas para esa labor, preparadas para ello antes de encarnar.
El foco receptor contaba con canales debidamente entrenados. Entre las planificaciones por cumplir, estaba recibir la verdad sobre la vida y obra del Mesías para darla a conocer por encima de todos los fanatismos y persecución es.
Aquél era un foco de alta espiritualidad. Los integrantes se reunían muy privadamente para recibir información dictada desde los Altos Planos de Luz.
 
El Maestro Serapis Bey, conocido por entonces como “Mago Merlín”, coordinaba las actividades del foco en el plano físico y el Maestro Víctor, no encarnado, lo hacía desde las Altas Esferas.
Estudiando algunas crónicas que ellos tenían referente a los Esenios y otros escritos antiguos, con ayuda de los Maestros Ascendidos, comenzaron a estructurar la verdad acerca de la vida de Jhasua de Nazaret.
Querían darla a conocer para terminar con el poderío de la Iglesia; pero la oscuridad del plano, los ataques de la Otra Polaridad impidieron la realización de estos deseos.
Los Caballeros de la Mesa Redonda también estudiaron los sistemas de gobierno. Comenzaron por dignificar la posición del rey en base a la actuación que él tuviera, según el principio espiritual enseñado por el Maestro Jhasua: “Amar a Dios sobre todas las cosas, al prójimo como a ti mismo”.
El Rey Arturo daría el ejemplo inicial que habían de seguir todos ellos en vidas futuras.
El rey debía ser un servidor de sus súbdito, responsable, ante Dios, de la elevación moral y espiritual de su pueblo.
Ellos buscarían la manera de implantar nuevos sistemas de gobierno basados en los principios espirituales.
Se comprometieron a continuar con la labor de Arturo durante varias encarnaciones en las que lucharían para libertar a los pueblos e incluso llegaron a saber que la humanidad, en tiempos futuros, tenía la esperanza de liberación en un continente con forma de copa (América) en el cual volverían a nacer para libertarlo de las fuerzas de la oscuridad.
Los integrantes del foco estaban en posesión de una copa de oro muy antigua, procedente de los Esenios, juntamente con algunos papiros e interesantes crónicas de los apóstoles, todo lo cual era auténtico.
La copa la utilizaban como símbolo de la actitud que debían tener para recibir la Sabiduría procedente de los Altos Planos de Luz.
 
“El misterio de Stonehenge y del Santo Grial”:
 
 
Cuando se hace una planificación de luz desde las Altas esferas, se eligen lugares que tengan un record etérico acumulado desde pasados tiempos.
Tales condiciones reunía la antigua Bretaña (Inglaterra actualmente) donde vivió el  Rey Anfión en la época de la Atlántida.
El territorio en el que está situado el misterioso monumento de Stonehenge formaba parte de la provincia atlante de Teoskandia con capital en Orozuma, zona central de todo el país.
Allí se encontraba el Centro de los Pinos elegidos por el país: Allí se encontraba el cerro de los pinos elegido por el príncipe Anfión para construir el pabellón de uso privado algo separado del palacio, como lugar de reposo que todos respetaban por lo cual nadie visitaba.
En ese lugar, se reunía la Fraternidad de los Profetas Blancos y se estableció un foco de contacto con las Altas Esferas de luz.
El rústico monumento de Stonehenge, construido con enormes piedras verticales en círculo, era un santuario privado situado dentro del bosque, cerca del pabellón.
Tenía tan alta vibración que los Maestros y altos seres de otras dimensiones podían densificarse transitoriamente allí para dar instrucción directa.
El récord etérico se conservó a través de los siglos, pues los centros energéticos permanecen en el tiempo y nunca se destruyen.
Por ello, pudo ser  posible establecer allí un segundo foco de luz, que fue Camelot (ciudad de Inglaterra) en tiempos del rey Arturo.
La veneración, el respeto por la naturaleza transmitidos por Anfión, también perduraron siendo posteriormente principios espirituales básicos entre los Celtas, transmitidos al pueblo por los sacerdotes llamados Druidas.
Cuando el rey Arturo, todavía prevalecían el respeto, la admiración por la naturaleza que el Mago Merlín se encargaba de enseñar al pueblo.
En los últimos tiempos de la lejana Atlantida, todas las tierras del mundo estaban unidas en un solo continente, que era como una inmensa isla de aguas por todo alrededor.
Simbólicamente, el continente tenia forma de una estrella de cinco puntas, en cuyo centro estaba el reino de Teoskandia con su capital Orozuma.
Al caer en degeneración la Atlantida y entrar en división sus habitantes, se creó el separatismo consecuencia de los intereses egoístas, la avaricia, la invasión del psiquismo y negatividad por el mal uso del conocimiento.
Se desencadenaron guerras, luchas por el poder, lo cual repercutió a nivel físico con graves resultados.
Hubo entonces un rompimiento de las tierras seguido desplazamientos y cambios muy fuertes, hasta la estabilización final de los cinco continentes conocidos en la actualidad.
Las tierras que ahora son América se alejaron hacia la izquierda; Europa y África quedaron hacia la derecha para marcar división entre lo material y lo espiritual.
Cualquier buen observador  puede ver como encajan los continentes de América, África y Europa si desapareciera el Océano Atlántico que los separara en los actuales tiempos.
Stonehenge era un Santuario de Sabiduría Divina que fue establecido por siete Profetas Blancos acompañantes de Anfión, entre los cuales estaba quien posteriormente...  en tiempos de Jhasua de Nazaret, fue José de Arimatea.
En la época de Anfión, él (Jose de Arimatea) se llamaba Themedien y era médico, uno de los más cercanos seguidores del Mesías a lo largo de sus encarnaciones en la Tierra.
Después de la Crucifixión del Maestro, como misión de luz, decidió llevar el conocimiento espiritual de los Esenios a los continuadores de los Profetas Blancos, un grupo de solitarios que vivían en el territorio de Bretaña.
El les quería informar que el Mesías había vuelto a nacer con el nombre de Jhasua y también sobre la existencia de los Esenios, les llevó crónicas de la vida del Maestro y también les regaló su propia copa de oro, la que le correspondía como integrante de un grupo espiritual privado existente en el santuario Esenio, del Monte Carmelo.
 
 
 
Las copas eran un símbolo de la Sabiduría Divina proyectada en los tiempos antiguos de la lejana Atlántida por el Maestro Antulio.
José de Arimatea sabía que una de las encarnaciones del Mesías como el rey Anfión de Orozuma se había desarrollado en Bretaña, donde los Profetas Blancos construyeron un santuario al aire libre del cual quedan las rusticas ruinas de Stonehenge y que, por el recordé de luz allí generado, siguió existiendo una agrupación espiritual por muchos siglos.
Tal fue la razón de que nacieran, en ese lugar, los Caballeros de la Mesa Redonda.
Los Celtas eran una rama directa de los continuadores de Anfión y vivían posteriormente en la región de Stonehenge.
Veneraban a la naturaleza y conservaban la simbología espiritual del círculo. En las reuniones, todos eran iguales ante los ojos del Dios Uno, pues no había diferencias de clases sociales ni de ninguna índole.
Los Celtas pasaron por condiciones muy fuertes de persecución y lucha, debido a los ataques de los romanos.
Por ello, no tuvieron tiempo de crear una religión complicada con rituales sino que sencillamente veneraban a la naturaleza, al igual que posteriormente los solitarios del Bosque Encantado que vivían cerca de Camelot.
Esas fueron las bases que el Mago Merlín sembró en la mente del pueblo y del rey Arturo cuando era niño, pues se crió entre los solitarios protegido especialmente por Merlín.
La idea de un solo rey para todo el país la estableció el rey Anfión y la continuo el rey Arturo.
De ahí la gran fuerza y arraigo que tiene la Monarquía aun actualmente, en el país  de Inglaterra.
Igualmente, el concepto acerca de los Caballeros asociados con la nobleza de ideales, amor al prójimo, una moral correcta.
Sobre la historia del Santo Grial, tan buscado y nunca encontrado, decimos que esto es una falsedad.
La Leyenda tiene su origen en el Santuario del Monte Carmelo, donde se reunía un grupo especial de Esenios pertenecientes a los altos grados, en la Sala de Asambleas y en forma muy privada.
Sobre la mesa redonda de esa sala, había muchas copas de oro, tantas como integrantes del grupo y no una sola.
Representa la Sabiduría Divina recibida en ese lugar.
José de Arimatea era miembro de ese grupo. Después que se disolvió, cuando la copa quedó en su poder, la llevó consigo Bretaña para regalarla a la Fraternidad que estaba allí.
El relato quedó escrito. Posteriormente, lo tenían sus Caballeros de la Mesa Redonda, acompañados del rey Arturo.
Atacados ellos por la Iglesia y por todos los nobles, perdieron la vida, el castillo de Camelot, todo cuanto tenían fue usurpado por la Iglesia, las crónicas y escritos esenios, lo que habían recibido ellos en el foco y entró en escena el obispo tergiversador Benjamín Northin, a quien encargaron escribir el relato según sus propias ideas y conveniencias .
El invento la historia del Santo Grial diciendo que era la copa de la Ultima Cena de Jesucristo y sus Apóstoles. Posteriormente, por todas partes la buscaron y nunca se encontró.
Se refería realmente a la copa de oro llevada a Gran Bretaña por José de Arimatea, regalada a la fraternidad que vivía cerca de Stonehenge.
Las  leyendas y fábulas tienen siempre un fondo de verdad; pero muy desfigurado, deformado a veces, hasta irreconocible.
De no ser porque los Maestros de Luz revelaron esta verdad, nunca se habría sabido hasta la Era de Capricornio y el recorrido de mil años en la Nave Esfera, donde todo podrá ser conocido como correctamente sucedió.
En el Santuario  del Monte Carmelo, había también un lugar muy especial; La Gruta del Profeta Elías, dentro de la cual se encontraba una enorme copa dorada del tamaño de un hombre alto, toda hecha de oro.
Representaba la sabiduría Divina procedente de Antulio y que el Profeta Elías también tuvo; pero, además de un símbolo, era un recuerdo de la ignominiosa muerte del Maestro por envenenamiento, condena dada por los sacerdotes del Templo de Zeus en la antigua Atlántida.
El día en que lo prendieron, Antulio (sacerdote del temple de Zeus) daba una valiosa instrucción a sus discípulos.
 
“La infancia de Arturo”.
 
 
 
 
Arturo no pertenecía a ninguna familia real, pues era hijo del pueblo. Sus padres, persona muy humildes, vivían en una pequeña aldea de Bretaña a la que no se le conocía nombre alguno.
El se llamaba Filip Lumiere y ella Isabela Leblanc, ambos de ascendencia francesa.
Tenían ocho hijos y, por su pobreza, apenas los podían alimentar. El pequeño Arturo pasó muchas necesidades. Era delgado, de cabello negro, el hijo menor de una familia numerosa,
El ser conocido como “Mago Merlín” pertenecía a la comunidad de los solitarios que moraban en el Bosque encantando.
Conoció al niño por circunstancias casuales al parecer pues, por ser muy humanitario y caritativo, ayudaba a la gente de la aldea.
Les llevaba alimentos, ropa, los orientaba espiritualmente en forma sencilla. La gente lo llamaba “Mago” por las facultades extraordinarias que tenía y sus múltiples conocimientos, pues sabía de todo.
Como clarividente, había en él gran percepción interna. Integrante del grupo de los Solitarios, era de los pocos que se dejaban ver, pues permanecían discretamente en lo intrincado del bosque cercano a la aldea donde el niño Arturo nació, en la región de Camelot.
Por allí, sobre una alta colina, había un castillo real y, en la cercanías, estaba el Bosque Encantado.
Ese nombre lo puso el pueblo por temor, ya que circulaban rumores de leyendas terroríficas acerca de genios y peligros.
Por tal razón, los Solitarios del foco de Sabiduría Divina que vivían en el bosque estaban tranquilos, pues ellos pusieron en circulación los rumores.
En el foco,  supieron que iba a venir un rey para toda Bretaña y lo referente a Arturo.
Merlín, por ser uno de los Solitarios, también lo sabía por lo cual reconoció  al niño inmediatamente, cuando lo vio. S
iendo tan pobres sus padres y teniendo tantos hijos, no lo podían mantener ni educar.
Entonces, sintieron un gran alivio al entregar, a Merlín, su hijo menor; pero también por la confianza que él se había ganado entre el pueblo, la admiración que le profesaban.
Merlín lo llevó a la comunidad de los solitarios y él especialmente se encargó de Arturo, lo crió, lo educó, le inculco el amor hacia la naturaleza, a identificarse con ella, especialmente con las aves y peces.
Como Merlín enseñaba a leer  y escribir a los niños de las aldeas cercanas, conoció a Arturo en esa labor.
Le llamó la atención su inteligencia, que no era un niño común. Teniéndo sólo siete anios , impresionó a Merlín con sus palabras de interna sabiduría.
Después de pedir permiso  a sus padres, lo llevó al Bosque Encantado para vivir con los solitarios, pues él era uno de ellos.
Esta historia venia de repetirse con el paso de los siglos porque, en una anterior encarnación durante los tiempos de Jhasua de Nazaret, siendo Juan Bautista (Rey Arturo), vivió con los ancianos en el Santuario de Quarantana desde niño en la época de los Esenios, permaneció entre ellos y allí se educó.
Leyendas de aparecidos, monstruos y fantasmas circulaban por allí acerca del Bosque Encantado.
Como Creían que había peligro, la gente se alejaba de ese lugar y eso era lo que querían los Solitarios.
En tan aparatado sitio, tenían un foco de luz y contacto con las Altas Esferas.
Por esto, pero también por crónicas y relatos antiguos que ellos poseían, llegaron a conocer la verdadera vida Jhasua de Nazaret.
Habían pasado muchos siglos desde que José de Arimatea los visitó en tiempo de los Esenios.
Con anterioridad a la invasión romana, el territorio que ahora es Inglaterra Y Francia había pertenecido a los Celtas que eran descendientes de los atlantes y cayeron abatidos por el brutal poderío de Roma.
En los libros de Josefa Rosalía Luque Álvarez, se habla de Vercia, la Druidesa quien, en compañía de un grupo representativo, visitó a Jhasua con deseos de libertad para su pueblo.
Entre los celtas de descendencia atlante, estaba la Leyenda del Gran Hesu, muy parecida a la de Jhasua de Nazaret.
En Bretaña, había muchas guerras, los nobles vivían peleando por la conquista de tierras limítrofes y porque se aburrían al no tener nada que hacer. Acaparaban territorios vecinos por la violencia, se los repartían con la Iglesia que iba creciendo en riqueza y poder, había demasiados atropellos, injusticias, humillaciones.
El pueblo vivía sometido en forma irracional sin poder reclamar nada. Por todo ello planificó, desde Arriba, la llegada del Rey Arturo para contrarrestar el abuso y atropello.
El foco receptor de los Solitarios tenía una finalidad interna y externa. A nivel físico, estaba dirigido por el Mago Merlín, que era el Maestro Serapis Bey encarnado y, a nivel interno, lo dirigía el Maestro Víctor desde los Altos Planos de Luz. Por ello, el foco estaba bien protegido.

 

 
“La espada en la piedra”:
 
 
 
 
El suceso estaba preparado con mucha anticipación, porque era necesario impactar a la gente a través de lo milagroso y sobrenatural, para que fuera posible la existencia de un rey salido del pueblo y eso pudiera ser aceptado.
Había una misteriosa leyenda de procedencia muy antigua, referente a una espada clavada en una piedra muy dura situada en la plaza del pueblo.
Se creía que quien lograra sacarla de la piedra seria el rey de toda Bretaña. Con tan halagüeña promesa, iban muchos nobles a la plaza para intentar sacar la espada de la roca dura, que no estaba en un cementerio como algunos relatos consignan.
A pesar de los esfuerzos de muchos caballeros de noble estirpe e incluso de los grandotes y forzudos, nadie lo lograba.
¿Por qué estaba allí esa espada? No podían recordar la causa, pues siempre se encontraba en esa plaza y tampoco sabían como llegó a incrustarse en la piedra. La gente se acostumbró a verla. Como eran muchos los nobles hacían el intento, la leyenda se fue expandiendo.
La espada procedía de la Atlantida, porque el territorio de Inglaterra fue parte de ese continente.
Antes del tercer hundimiento, se desencadenó una guerra en la que se enfrentaron las fuerzas del bien y del mal.
En el tiempo de la batalla y en ese territorio, había problemas de volcanes.
Durante el enfrentamiento, debido al choque vibratorio que eso generó, explotó un volcán del cual salieron rocas en estado de magma ardiente y, en una de ellas que estaba caliente, se incrustó la espada lanzada a distancia.
La batalla fue interrumpida debido al peligro volcánico, pero, en ese lugar, quedó la espada que luego, al endurecerse la roca, se solidificó.
El guerrero que la lanzó contra el enemigo se llamaba “Arcturus” y fue el mismo rey Arturo en una encarnación posterior, pues había comenzado un ciclo y tenía también que cerrarlo.
La espada se llamaba “Excalibur”, tenía el mango de oro, estaba en esa piedra desde antiquísimos y nadie había podido sacarla de allí.
La roca donde se encontraba incrustada era un mineral desconocido de gran dureza. Al formarse la leyenda, la gente decía que esa espada era mágica y había sido colocada allí por mandato de Dios para que fuera rey quien lograra desprenderla. No había nada escrito en la piedra.
Merlín conocía la verdad acerca de la espada, su origen y destino, sabía que no estaba allí por casualidad e igualmente lo conocían los solitarios – vendrá un rey que libertará al pueblo del atraso – decían – .
Merlín hablaba a Arturo de la espada para lograr interesarlo; pero el nada le comprendía.
Le parecía algo lejano pues no se le podía ocurrir llegar a ser un rey.
-La mano de Dios la coloco allí – comentaba la gente – Cuando Arturo tenía catorce años, de manera sorprendente, la saco de la piedra.
Sucedió así:  
Un día, estaba en la plaza mirando la espada por curiosidad y tuvo una visión muy extraña: Vio la batalla de lejanos tiempos en plena acción, el momento en que la espada era lanzada por el guerrero y se clavó en la piedra. La visión lo impacto mucho. Como no comprendía, fue a preguntarle a Merlín el significado y él le dijo:
-Ya que tuviste esa visión, ¿por qué no intentas sacar la espada de la piedra? No te lo digo para que seas ningún rey pues ésa es una leyenda, sino sugiero que lo hagas para comprobar que el poder está en el corazón, como tú me dijiste de niño cuando te conocí: “La verdad la tienes en el corazón”. ¿Recuerdas? Pero yo añado que la sabiduría está en la espada. Inténtalo para comprobarlo.  
Tres días después de esta conversación Arturo, intrigado por las palabras de Merlín, volvió a la plaza durante la noche mientras todos dormían.
Al tocar la espada, sintió circular una gran energía por su brazo izquierdo, pues era zurdo. Se atrevió a intentarlo y saco la espada de manera muy fácil, lo cual lo asusto mucho.
-¡He profanado este lugar sagrado!  - pensó- por lo cual rápidamente coloco la espada en su sitio y abandono la plaza sintiéndose culpable. Luego, lo conto a Merlín.
El mago lo disculpó de manera risueña, lo animó: Inténtalo otra vez - le dijo - Así podrás comprobar, por ti mismo, que la Verdad y la Sabiduría están en el corazón – Arturo quedó muy pensativo.
Como Merlín sabía que el muchacho regresaría a la plaza, comenzó a hacer comentarios por el pueblo acerca de la espada y de que alguien la iba a sacar de la piedra tal día, a determinada hora. Luego, fue con Arturo para acompañarlo, cuando había gente por allí que miraba.
Estando en esa situación, llego un guerrero fuerte y grandote que, delante de Arturo y de Merlín intento sacar la espada con toda su fuerza; pero fracaso.
Era alto, recio y media como dos metros de estatura. De un corrientazo, cayó al suelo cuando trato de sacar la espada agarrándola con sus manos. La gente se reía, había burlas y sarcasmos. Ese hombrón era un ser de la Otra Polaridad que venía con el propósito de perturbar.
-¡Rey, Rey!- Clamaba la gente- aprovechando la ocasión, Merlín presento a Arturo de manera solemne. ¡Tenemos aquí al Rey de Inglaterra! Él fue quien logro lo que nadie hizo: saco la espada de la piedra con mucha facilidad- Arturo solo había actuado para complacer a su Maestro y comprobar el poder del corazón, sin pensar  en ser rey ni dar importancia al hecho; pero el deliro de la gente era muy grande, lo proclamaban rey y esto lo dejaba desconcertado.
Así fue como un muchacho de catorce años, hijo del pueblo, llego a ocupar el trono real lo cual era bastante sorprendente.
Desde la lejana época del tercer hundimiento de la Atlantida, había sido preservada esa espada por los seres de luz hasta que llegara el momento destinado por la eterna ley.
Ellos conocen el pasado y el futuro. La resguardaron durante tantos siglos de manera intacta, entre las matas y espinas de un bosque que allí se formó, pues sabían que venían tiempo de mucho oscurantismo en los cuales la única manera de impactar a la gente para conseguir buenos propósitos seria a través del misterio que despierta  lo que aparenta ser milagroso, sobrenatural.
Esa parte de la Atlantida donde ocurrió la batalla no se hundió en las aguas del océano.
El guerrero que luchaba era un ser de luz que se defendía del otro polo: Alto, rubio, de ojos claros, contextura fuerte y una estatura de casi dos metros.
La espada de mango de oro estaba hecha de metal. El nombre de Excalibur significa “La defensa de los pueblos” se encontraba inclinada hacia el lado izquierdo porque Arturo era Zurdo y la saco con la mano izquierda.
Más tarde, ya siendo rey, se volvió ambidextro; es decir: que utilizaba las dos manos. Con la derecha, realizaba lo externo firmaba reglas y documentos; con la izquierda escribía lo referente a lo espiritual que se recibía en el foco.
 
“Un solo rey para todos”
 
 
Hacía falta unificar el país porque los nobles, creyéndose todopoderosos, se atacaban unos a otros en continuas agresiones o guerras.
Se precisaba la obediencia a una sola autoridad para que hubiera paz y bienestar. Por ellos, la llegada de Arturo fue muy beneficiosa.
Se logro un gran cambio de elevación y superación en las conciencias, en la vida al haber, en ese lugar, un rey salido del pueblo lo cual rompió viejos esquemas; aunque también despertó la ira de las clases altas, porque cualquier ser humano podría llegar a ser rey ante los ojos de Dios y no quedaba ya esa autoridad bajo el dominio exclusivo de un grupo privilegiado como siempre había sucedido.
El Rey Arturo dio un ejemplo. Además de lograr la unificación de los distintos territorios que estaban bajo el mando de los nobles, termino con las luchas y disputas inútiles de uno contra otros para apoderarse de las tierras ajenas, entretenerse, dar rienda suelta a sus instintos violentos. Propuso el sistema de los torneos, llamados también “justas”, para resolver las diferencias y enfrentamientos sin necesidad de perderse vidas humanas.

Se logro un gran despertar, una subida de nivel en todo el país, a pesar del descontento y la oposición que ese sistema político causo entre la nobleza. Aun ahora, en la época moderna de Fin de Ciclo permanece el esfuerzo que perduro a través de los siglos.

Los altos ideales proyectados en los tiempos del Rey Arturo dieron esperanza a la gente, la elevaron en una de las etapas más oscuras.
La labor de Arturo, su forma de proceder no fue aprobada por los nobles de tradición quienes silenciosamente,  en conjunto con la Iglesia, planificaron destronar a Arturo y asesinarlo.

En malestar creció porque el Rey rompió con la Iglesia abiertamente, pues era preciso acabar con su abusador dominio.

Por ello, los mismos intereses que, a lo largo del tiempo, persiguieron a los misioneros de la Luz sacaron del plano al Rey Arturo y también a varios de sus valientes caballeros. Los poderosos creían que, de esa manera, terminaban con tan hermoso esfuerzo y anulaban toda oportunidad para los tiempos futuros.

“Los Caballeros de Rey Arturo”:




Eran seres regidos por un código de alta moralidad. Juraban fidelidad a Dios, a la Patria, al Rey, siempre que este fuera un gobernante justo y correcto.

En caso contrario podían no seguirlo y también sucedería que el pueblo lo sacaría del trono.

Todos sus actos debían estar regidos por ideales de servicio, de justicia, protección,  de ayuda a los más necesitados e indefensos.
Cualquier ciudadano que reuniera estos requisitos y nombrara meritos por sus propias acciones podría ser nombrado caballero por el mismo rey. 

Esto despertó a muchas personas de su letargo, les dio esperanza y elevo su nivel, ya que se presentaba la oportunidad de tener una vida mejor e incluso alguien del mismo pueblo, con los suficientes merecimientos tenía la posibilidad de llegar a ser un Caballero de reluciente armadura.
En las reuniones de los Caballeros habían dos mesas: Una para las actividades externas, rectangular, de forma alargada. La mesa para las reuniones internas si era redonda y no tan grade como se piensa, pues quienes acompañaban al Rey en forma privada venían siendo pocos.

El Rey se reunía con los Caballeros de nivel externo en las Sala del Consejo. Delante, estaba la mesa rectangular de Arturo con su trono y los Caballeros alrededor.

En frente de él, a los tres lados, ellos lo miraban esperando sus órdenes y consejos. Entre los Caballeros externos habían nobles de alcurnia y otros que no lo eran por haber salido del pueblo.

En esas reuniones, se trataban de asuntos referentes  al gobierno, a lo relacionado con la autoridad, el bienestar de todos. El Rey instruía a los Caballeros, les daba un código de normas que ellos debían aprender de memoria, comprender y practicar el contenido.

Era como un manual de ética y buen comportamiento basado en altos ideales, lo cual motivaba el necesario cambio mental que se precisaba hacer. Había allí una ciento veinticinco Caballeros la mayoría de posición y rango.
Alrededor de la mesa para uso interno, que era redonda, se reunían trece Caballeros, incluyendo; entre ellos, al Mago Merlín (Maestro Serapis Bey encarnado).

El dirigía las actividades del foco en compañía del Rey Arturo. Esa mesa no tenía nombres escritos juntos al lugar donde cada Caballero se sentaba ni tampoco había allí espadas colocadas sobre la mesa, tal como lo presentas las películas y videos relacionados con el Rey Arturo.

Las trece sillas estaban hechas de cobre, con formas bellas y de altos respaldos, todas iguales. La mesa de la Sala de Consejo, donde se encontraba el trono del Rey era diferente  era diferente.

Los Caballeros de las reuniones externas desconocían la existencia de la mesa redonda, las actividades internas, que había un foco de recepción con los Altos Planos de Luz; pero sucedió que uno de ellos era muy curioso y recelaba algo. Un día, estando  la puerta que daba acceso al cuarto de reuniones privadas semiabierta, se asomo y logro ver lo que había adentro: La mesa redonda con las especiales sillas.

Luego, ese Caballero lo iba comentando por ahí. Al romperse el silencio, el foco sufrió la arremetida de la Otra Polaridad que se iba colando.  Aunque ese Caballero viera la mesa redonda, nadie del grupo externo podía siquiera imaginar la existencia de un foco ni era capaz de entenderlo por entonces, pues habría resultado increíble.
El castillo quedaba en la región de Camelot, sobre una colina. Hacia la izquierda, había  caminos secretos e ignorados, que conducían al Bosque Encantado donde el rey se reunía con los Solitarios que lo educaron.

El ´pueblo estaba a la derecha. Por unas sendas semiescondidas de la izquierda, se podía ir al bosque sin que nadie lo advirtiera.
Los Caballeros de noble alcurnia se sentían honrados de pertenecer al Gran Consejo en compañía del Rey Arturo y también buscaban su protección.

Esto hizo posible el logro de la unión para que no vivieran siempre peleando por cuestión de territorios o por cualquier asunto intrascendente. Se logro la unidad al nivel externo: un Rey para toda Inglaterra y no tantos reinos pequeños separados unos de otros, en continua discordia.

Como cualquier persona podía llegar a ser Caballero, esto irritaba mucho a los que eran de alcurnia; pero, aunque aparentemente se integraran y estuvieran con Arturo, se mantenían callados.

De estos ciento veinticinco  Caballeros externos, surgieron muchos traidores, porque no les gustaba ser iguales que un Caballero del pueblo y se sentían rebajados.
Cuando estaban reunidos, el rey les hablaba, les decía cosas hermosas sobre la justicia, la condición  de ser servidores del pueblo y les daba una fuerte base moral, resaltaba la condición de nobleza que debe tener un Caballero, altos ideales, los buenos principios. Comenzó a dar normas, a hacer  leyes para imponer el orden. Los torneos resolvían cuestiones de honor.

Entre los altos principios impartidos a los Caballeros, estaban los siguientes: “La altura y seguridad que deben tener depende de las obras de bien que sean capaces de realizar.

La fuerza de un Caballero depende de la pureza de su corazón. Como defensores de la paz, solo utilizaran la fuerza para imponer justicia.

Tendrán misericordia con los vencidos, no los matarán e igualmente serán comprensivos con los equivocados y prepotentes, elevarán a las mujeres en su dignidad.

Todo Caballero debe respetar al prójimo como a sí mismo porque tanto a las mujeres como los niños, ancianos, los humildes y poderosos están hechos de la esencia de Dios; por ello, son iguales, hay que respetarlos, nunca atentar contra sus vidas. No se debe rebajara a nadie”.
Si se portaban mal y cometían abusos, atropellos, los sacaba y ya no eran Caballeros.

Estar en el castillo de Camelot les daba mucho prestigio e importancia, por lo cual buscaban a Arturo y se sumaban al grupo de sus Caballeros. Al entrar e incorporarse, debían hacer un juramento: “Juro por el Dios de mis padres que no daré mi brazo a torcer y no descansara mi espada hasta acabar con toda injusticia, atropello e iniquidad”.

Por ello, la palabra “Caballero”, tan usada en los tiempos modernos, ha quedado como sinónimo de dignidad, de correcta moral y alto proceder, de nobles ideales, pues la semilla fue sembrada para tiempos futuros; aunque, aparentemente, todo el esfuerzo que hicieron Arturo y sus Caballeros se perdió.
 
“La leyenda de Genoveve (gweneve)”:


 
Esa joven existió; pero no en la forma tergiversada y de novela rosa que cuentan. Vivía en el pueblo de Camelot, era muy bonita, de buena familia; aunque no noble.

En algunos relatos, la llaman “Jenny”. La gente no entendía que el rey Arturo no estuviese casado, trataban de buscarle esposa por eso de la genealogía y que, al rey, le correspondía una esposa para tener herederos al trono.

Entonces, pensaban que nadie más apropiado para ser la esposa del rey que esa joven bella y agradable que tenía todos los meritos para ser una reina. Arturo nunca se caso ni tampoco se intereso en complacer los deseos del pueblo sobre ese particular. Conoció a Genoveve, que visitaba el castillo de vez en cuando, la trataba con cordialidad amable; pero nada ocurrió.
Los amores contrariados por infidelidad y toda la tragedia que el obispo Northin inventó jamás ocurrieron. Ese melodrama rosado es propio de su imaginación. Con respecto al enamoramiento entre ella y el Caballero Lancelot del Lago, sucedió de manera diferente.

Simplemente se gustaban, había un sentimiento de atracción, lo cual fue advertido por algunas personas que corrieron el rumor de que él quería quitarle la novia al rey.

Esa es la esencia de toda la historia. Jenny y Lancelot no llegaron nunca a nada porque solo se gustaban. Habiéndose alejado Lancelot del castillo por algún tiempo, no legaron a formalizar sus relaciones porque, en el transcurrir de ese alejamiento, mataron a Arturo cuando Lancelot no estaba. El pudo escapar, salvarse de la persecución y se refugió en Francia.
Lo de  Arturo y la reina Genoveve, su infidelidad, fue toda una elucubración. La tergiversación quedo escrita y es lo que ahora se conoce. Tampoco Genoveve fue llevada a la hoguera para ser condenada por infidelidad y Lancelot la salvó montado a caballo arrancándola de entre las llamas.

Lancelot era un protector de Arturo, pues había nacido para eso. Debido al incidente de Jenny, a su alejamiento, él sintió remordimientos y creyó haber fallado porque decía que, si hubiera estado acompañándolo, no le habrían cortado la cabeza.

Siempre se consideró el guardián de Arturo. Lo emocional lo sacó del foco de recepción e igualmente pensaba que, por su culpa, el foco había dejado de existir, lo cual no era la verdad.
Los primeros que cambiaron la historia fueron los clérigos de la Iglesia que intercalaron las tonterías absurdas del Santo Grial. Después de ser derrotados en la batalla final, los adversarios que estaban en contra invadieron el castillo de Camelot y saquearon todo.

Se apoderaron de los escritos recibidos en el foco, que entregaron a la Iglesia. Aunque nadie los entendía ni les daba valor alguno, algo de atención pusieron en las crónicas de José de Arimatea, cayó en su poder. Era de regular tamaño, la miraban y no entendían su significado ni por qué estaba allí.

Hubo un acuerdo entre los nobles y la Iglesia cuando el saqueo: Ellos se apoderarían del castillo y asumirían el poder: pero lo espiritual correspondía a la Iglesia. Luego, se desató una encarnizada persecución contra los Caballeros y mataron a casi todos, exceptuando a Lancelot del Lago que se salvó.

“La batalla final”:


 

Sucedió lo siguiente en aquella época: Los nobles descontentos, asociados  con la iglesia, se enfrentaron con el rey Arturo y su ejército. Las fuerzas enemigas eran mucho más numerosas que las del rey Arturo. L

a mortandad fue terrible de uno y otro bando, pues casi nadie quedo vivo. Cuando Arturo se adelantó montado en su caballo blanco hacía el centro de los ejércitos, presentía que le iban a matar e internamente lo aceptó, pues sabía que su labor había terminado y tenía que irse. Para evitar derramamiento de sangre, se entregó, se dejo asesinar.
Los dos bandos contrarios se encontraban de un lado y otro, esperando el comienzo de la batalla; pero el rey no quiso pelear sino que, adelantándose desde donde estaba, fue hacia las filas contrarias del enemigo para entregarse. Estando en la mitad del campo, salió del otro lado Mordred, llevando a su lado un guerrero fuerte y grandote.

Los dos fueron avanzando hacia el centro, donde estaba Arturo montado en su caballo.

A cambio de su entrega, él pedía que no se derramara sangre, que se respetara a sus capitanes, a su ejército, lo cual Moldred rechazó.

A una señal suya, el guerrero grandote, que llevaba una espada muy afilada, cortó de un tajo la cabeza de Arturo. Ante tal atropello, los capitanes, furiosos, arremetieron contra el enemigo y comenzó la batalla; pero, antes de empezar, alcanzaron a Mordred, lo mataron y también a su acompañante que fue despedazado.
Arturo había querido dialogar y de nada le sirvió. Aunque se entregó para evitar la pérdida de vidas humanas, lo que sucedió fue una matanza terrible de ambos lados luego que su cabeza rodó por los suelos, Sus enemigos no podían dejar vivo, pues no les convenía.

Los dos ejércitos estaban frente a frente y esperaban la orden para comenzar la batalla, tal como era la costumbre; pero, en lugar de eso, Arturo se adelantó para entregarse al enemigo. El ejército contrario estaba dirigido por Mordred.
El guerrero que lo decapitó se llamaba Michel, era un asesino alto feroz. Tres personas se encontraban en el centro del campo de batalla: Arturo, Mordred y Michel.

El rey dijo que se entregaba con la condición de que ellos respetaran las vidas de los soldados, a los caballeros y así lo hizo para que no hubiera derramamiento de sangre, Mordred dijo que no aceptaba y que, si Arturo se entregaba al enemigo, lo pagaría con su propia vida. Hubo entonces un gran silencio aprovechado con Michel para cortar, rápidamente y sin más explicación la cabeza de Arturo. Moldred lo había llevado para eso y le dio la orden con la mirada.
¡Asesino!- Se oyó rugir en el otro bando del ejército. Inmediatamente atacaron. Sucedió el gran desastre que Arturo trataba de evitar impedir. Asesinados Mordred y Michel, el plan que Mordred tenía de apoderase del trono fracaso; pero la Iglesia y los nobles tomaron el poder por la fuerza con persecución y muerte de los pocos que quedaban,  no respetaron nada ni a nadie.

Por ser un cobarde, Mordred llevaba al guerrero Michel a su lado, ya que delegó en él la labor de asesino directo. Michel fue descuartizado allí mismo por la furia de los soldados. Arturo perdió la vida a los veintisiete años.  
Toda esa historia está muy tergiversada en la leyenda que ha perdurado pues, según los tergiversadores, Arturo quedo con vida después de la batalla, perdonó a Genoveve la supuesta traición y al Caballero Lancelot.  A

rrepentida Genoveve se refugió en un convento y pidió perdón a Arturo acompañada por dos monjas, en una entrevista secreta. Le dijo que le perdonara su enamoramiento y su infidelidad luego, Arturo, según el relato tergiversado y mentiroso se quedó solo.
Un dato interesante en la película y el video es el niño que aparece al final. Viene siendo como un testimonio que él da a Arturo, referente a que no fracaso ni todo se había perdido.

El niño existió, llego a última hora cuando iba a amanecer, y está esperando el comienzo de la batalla. Con su inocente presencia, le dio un testimonio de que había dejado muy buena semilla, una magnífica labor cumplida.

Arturo lo nombró Caballero; pero después lo mando regresar  a su pueblo: ¡Vuelve con tus padres!- Le dijo- Pues tu vida se necesita y no la puedes arriesgar tan pronto, antes de tiempo. Ayuda a tu familia, trabaja, forma un hogar y se feliz cuando nazcan tus hijos.
Entre los Caballeros del grupo interno que lo acompañaban estaban: Lancelot del Lago, de origen Francés, Sir Percival, Halagat, Pellinore, que no era un viejito sino un apuesto joven. Lancelot tenía el cabello largo y destacaba en el manejo de la espada.

Carismático en el sentido en el sentido de que atraía a la gente por su forma de ser, gentil, atlético, tenía gran facilidad de palabra, pureza interna y de ideales. Arturo le decía que era un niño grande: “Cuando Surja el continente de la copa (América, la Tierra Prometida) tu serás un diamante pulido y esos tiempos futuros están por llegar” – le decía.
Sobre la mesa redonda, en la sala donde se reunía el grupo interno del foco, había una estrella de cinco puntas. En cada una de las puntas, se encontraba un candelabro que iluminaba el recinto. La estrella estaba sostenida por una bella y artística cadena. La mesa redonda de regular tamaño, simbolizaba la igualdad entre todos.
 
“¿Quién era Mordred?”

 
Aunque Arturo no se casó, según la leyenda tergiversada, Mordred era su hijo; pero esa no es la verdad.

Nació por programación de la Otra Polaridad para combatir a Arturo y destronarlo, usurpar el poder, lo cual no sucedió porque murió en la batalla que hemos relatado.
Los nobles estaban muy disgustados contra Arturo, así como también la Iglesia que odiaba al rey por haberse separado de ella y enseñar la verdad abiertamente a la gente, por no someterse a su omnipotente poder, atreverse a desafiarla.

Reunida con los nobles, tramo todo el complot; pero, antes de asesinarlo, para desprestigiarlo le inventaron un hijo ilegitimo no reconocido, lo cual iban propagando por ahí.

También se lo hicieron creer al Mordred, joven inmoral, de costumbres depravadas que se enfrento a quien creía su padre reclamando sus derechos. Tenía malos sentimientos por ser un servidor del Otro Polo.
Cuando se entrevisto con Arturo, era un muchacho de trece años; pero aparentaban dieciocho.

Tenía fama de ser ambicioso y de perversos sentimientos. La entrevista si sucedió; aunque de manera muy diferente a como la relatan la película presentados por ustedes.

Con respecto a Genoveve, si se metió a monja al quedarse sola luego de la muerte de los Caballeros a los que persiguieron y asesinaron.

En esa decisión tuvo mucho que ver el obispo Northin que tergiversó la historia.

Al ver a Genoveve triste y desconsolada fingió ser su protector, la aconsejaba. Posiblemente trato de seducirla y acaso lo consiguió; aunque tenía mucha más edad que ella.

Era un obispo astuto, solapado. Disfrazado de bondad, fingía ser su protector y le daba consejos.


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